La gran crisis de la Baja Edad Media, siglos XIV-XV.
El crecimiento demográfico europeo de los siglos IX al XIII está basado en la ampliación de los campos de cultivo, Como la alimentación se basaba en cereales y la salud era precaria toda mala cosecha provocaba crisis de alimentos, hambres y muertes.
A finales del siglo XIII y principios del XIV las malas cosechas provocaron escasez de alimentos, desnutrición, hambrunas, epidemias y muertes. Los organismos muy debilitados no pudieron combatir enfermedades como la Peste Negra que en pocos años provocó la muerte de la tercera parte de la población europea. El pueblo no se resignó ante la situación y se lanzó a la rebelión y el pillaje, y se alzó contra sus señores.
Además desde 1339 hasta 1453 se produjo un largo enfrentamiento bélico entre Francia e Inglaterra (La Guerra de los Cien Años), lo que contribuyó aún más a la inestabilidad de la situación social. Los soldados devastaban los campos, arrasando cuanto encontraban a su paso.
La religiosidad de una época difícil
Ante tal cúmulo de desastres los europeos buscaron consuelo en la religión. Tal vez se trataba de una manifestación de la ira divina y había que hacer penitencia para obtener el perdón.
A lo largo de los siglos XII y XIII:
- surgen los movimientos heréticos, grupos religiosos que se alejaron de la iglesia romana e intentaron renovar el cristianismo por su cuenta..
- aparecen las órdenes mendicantes ( franciscanos, dominicos,..) que abandonan los monasterios y predican en las ciudades con el ejemplo de la pobreza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario